Puedes ser bueno con tu hermano y tu hermana.

Pero señor, ¡qué pero le puede poner la señorita a D. Eduardo!

No puedes comprar dulces, querida mía.

Maese Pérez está enfermo, dijo: la ceremonia no puede empezar.

porque una mujer desgraciada no puede estar sin un poco de veneno en su ridículo.

Puedes hacer algún bien? Puedes estar alegre y ser bueno.

uno de los monteros de don Dionís, dirigiéndose á su señor: ahí tenéis á Esteban el zagal, que de algún tiempo á esta parte anda más tonto que lo que naturalmente lo hizo Dios, que no es poco, y el cual puede haceros pasar un rato divertido refiriendo la causa de sus continuos sustos. ¿

Ya puede inferir el lector qué de escenas cómicas ha tenido el autor a su disposición.

Puedes leer su carta?

Mesonero Romanos ("El antiguo Madrid," p. 253) writes of it: "El convento puede llamarse un verdadero palacio regio.

El viento puede mecerlo.

yo te daré una felicidad sin nombre, esa felicidad que has soñado en tus horas de delirio, y que no puede ofrecerte nadie....

Su gobierno piensa en reducir muy considerablemente todos los renglones de su arancil; pero se ha espresado con reserva para negar ó conceder, si lo estima conveniente, esta reduccion á las naciones que no correspondan á los beneficios que les ofrece; ninguno puede esperar que le favorezcan sin compensacion.

junto á mí: Y pasa sonriéndose, y yo digo: ¿Cómo puede reír? Luego asomo á mi labio otra sonrisa, Máscara del dolor, Y entonces pienso:¡Acaso ella se

Nadie puede responder de un primer pronto, y.... DON EDUARDO.

tú ... en tus circunstancias, no puedes soñar en comprarlo.... VECINA.

exclamó saliendo del estado de incertidumbre en que se encontraba: mayor mal del que me ha sucedido no puede sucederme, y si por el contrario es verdad lo que nos ha contado Esteban ...

Desde este punto la juventud del primogénito de Fortcastell sólo puede compararse á un huracán.

No puede volar muy de prisa.

Siempre dice que no es más que un pobre organista de convento, y puede dar lecciones de solfa al mismo maestro de capilla de la Primada; como que echó los dientes en el oficio.