8 Metáforas para rama

Pero las ramas del tala Son mil arpas sin modelo, Que formó Dios en el cielo Y arrojó á la soledad; Si el pampero brama airado Y estremece al firmamento, Forma místico concento El árbol y el vendaval.

Dos castaños muertos en la primavera pasada estaban aún en pie; pero sus ramas eran de negro color, carcomidas y rotas.

Las ramas finas de que tales nidos se engendran son continuación de tubos mielínicos llegados de la médula espinal (fig. 116, b).

Allí, una rama va hácia el S. E., por en medio de los lagos de Greiffen y Pfaffikon, costea luego los de Zuric (en su extremo superior) y Wallenstatter, soltando un ramal sobre Glaris, y va á terminar en Coira, capital del canton de los Grisones, el mas montañoso y el segundo en extension de la Confederacion.

, una flor del jardín, una rama del bosque; para el que nada sabía, son una iniciación, tal vez la puerta de oro que se abre al jardín encantado.

Su imaginación prestaba los atributos de la vida á millares de objetos inanimados, como una antorcha que enciende una llama donde quiera que se le aplique: la rama de un árbol, unos cuantos harapos, una flor, eran los juguetes en que se ejercitaba la magia creadora de Perla; y sin que experimentasen ningún cambio exterior, se adaptaban á todas las necesidades de su fantasía.

Hasta en los tiempos antiguos, muy antiguos, ya casi olvidados, en que el jardín de las Hespérides no había sido invadido aún por la mala hierba, dudaba mucha gente de que pudiera haber árboles verdaderos, cuyas ramas tuvieran manzanas de oro macizo.

No pasemos adelante; Que estas peñas, estas ramas Tan intrincadas, que al mismo Sol le defienden la entrada, Solo pueden ser testigos De nuestro duelo.

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