Ante un reparo leve de Regina, cuenta Velasquín que muchas noches retorna á pie á su casa, para hacer ejercicio, y sube luego un sirviente por su caballo.-Hoysonríe galándaré mi paseo con doble placer.

Algunas noches, antes de dormir, la acompaño a pasar el rosario en el camarote.

La noche estaba en su alma; en desamparo, Exhalaba quejosa sus suspiros, Como ave herida que á los anchos mares Tuerce inexperta del materno nido.

La noche estaba con alternativas, clara y obscura; había luna en el cielo y pasaban de cuando en cuando nubarrones espesos que dejaban el campo negro.

Las noches eran para la amistad con Nacha.

La noche es toda amor, afectuosidad.

Las noches eran apacibles y calurosas, y la tertulia se prolongaba a veces hasta las nueve y media o las diez.

En breve se encontró con el navio, Que estaba en una vuelta ya esperando: La noche se apresura, el viejo Apolo Nos huye, y viene airado el grande Eolo.

No os aflijais así, madrina, ante todo recordad que la noche avanza, enviad á avisar á Don Fernando que se precava, en tanto que yo vuelvo á mi casa, y si algo supiere, os doy mi palabra que lo sabreis, aun cuando entendiese perder la vida.

XVIII Era la última noche de carnaval y el mulato Alejandro estaba de baile.

Por un lado la noche estaba detrás de biombos y por el otro estaba en pleno salón.

La noche estaba como boca de lobo.

La noche era toda calma, tibieza y solemne poesía.

En ocasiones, las noches eran calurosas (y más en septiembre que en agosto), sin poder nadie pegar los ojos; agitadas, nerviosas; el pulso latía aceleradamente, estaba conmovido sin causa aparente, el temperamento hacíase desigual.

Si la noche haze escura Y tan corto es el camino, ¿Como no uenis, amigo? La media noche es pasada Y el que me pena no uiene; Mi desdicha lo detiene, ¡Que nasçi tan desdichada! Hàzeme biuir penada Y muéstraseme enemigo.

Una noche estaba en casa de las de Urries, y como celebraban la acción de aquella tarde, que había sido muy brillante, alabé yo también lo ocurrido, mostrándome muy entusiasmada.

Al día siguiente del velorio y antes de que ninguna persona transite, examinan la ceniza colocada la noche anterior, para observar las huellas de las pisadas que pudieran encontrarse; la edad y el sexo a que pertenecen, y, por ellas, predicen quienes morirán tras del finado.

Así han huido, se dijo Lázaro, mis esperanzas; pero estas aves tornarán al nido antes que la noche cierre, y las ilusiones no volverán jamás al alma mía.

Noche al raso es lindísima colección de anécdotas y cuadros de costumbres, donde el ingenio, el talento y la habilidad para narrar están realzados por la naturalidad del estilo y por la gracia y el primor de un lenguaje castizo y puro, sin la menor afectación de arcaismo.

Atacaron primero los contrarios, y de una y otra parte se comenzó á pelear ferozmente con notable ventaja de los enemigos, mas sin declararse del todo la victoria, hasta que la noche que andaba tan cerca separó á los combatientes.

había olvidado que aquella noche era de gran comida en el Hotel Negresco, donde ella estaba instalada, con exhibición á los postres de bailarinas célebres.

Pero antes de adoptar ningún plan definitivo decidí acostarme con el fin de que el sueño amansase mi furor, teniendo por bueno aquel proverbio que dice que «la noche es buena consejera».

Y todas las noches es la misma cosa.

La noche es una dama misteriosa, como Ligeia, como Eleonora, las mujeres litúrgicas, transparentes y ultraterrenales de Edgardo Poe.

Las noches de luna eran la desesperacion de Rodrigo, no solo porque habia transeuntes en aquella frecuentemente desierta calle, sino porque dando la luna en el muro, borraba y hacia más indecisa la luz artificial.