Vaya, este es el acabose.

¡Vaya usted á soltar cuescos á su padre! Una gran carcajada coronó el elocuente apóstrofe de Conejo.

¡Vaya usted a describir esto sin conocer los nombres de dichos genios, ignorando sus lances de amor y fortuna, y no acertando a distinguirlos bien unos de otros! Lo que más se parece a la primavera, en mezquino y pobre trasunto, por artificio humano realizado, es un bonito baile.

Vaya usted con Diosexclamó con un fruncimiento de cejas que prestaba a su semblante una expresión singular.¡Vaya con Dios y que Él le aconseje! Al otro día, efectivamente, estaba en camino.

Vaya, poneos los sombreros, que aquí todos somos iguales, todos somos compañeros de armas, y lo mismo puede matarme a mí una bala que a vosotros.

, y... Vaya, confiésame que te has penetrado de tu papel de caballero y de buen hermano, y que estás contento de haberlo mostrado con una gallardísima acción.

Vaya á quien vaya, merézcale ó no, tenga derecho ó no le tenga aquel á quien un bien se destina, son cosas que importan poco ante la superior consideración de que ese bien me consta que no es mío y de que sólo le gozo por engaño, por delito y por mentir.

¡Vaya!, son verdaderos curas; en los ofrecimientos que le han hecho a usted sólo les movía su propio interés.

Vaya, hijo, no digas exprisiones...

Vaya, vuesas mercedes están muy divertidosdijo la muchacha poniéndose encendida como una amapola.

¡Vaya, papá bonito, no estés tan desabrido conmigo! ¿Cómo que no hay locura?

Vaya, no sería para tanto... exageración.

Vaya usted al c... ajo es la forma más dura de la cólera, que, un poco más suave en vaya usted al demonio o a los infiernos, es una mezcla caprichosa de cortesía y de furor.

Vaya, prima, seamos francos: usted me odia con todo su corazón.

(Vivamente.) ¡A ese gaznápiro insufrible! 35 ¡Vaya que es gana de contrariarme!

¡Vaya! Es hombre recio y de buen color, como yo.

¡Vaya! Era la hora del oscurecer.

Se repuso no obstante en seguida, y, entrando en la conversación con amable sonrisa, dijo: Vaya, vaya, Ramón; no sea usted mala lengua....

¡Eso es lujo! ¡Vaya, que si no se puede comer sopas en esas calles!... ¿Para cuándo esa subvención á la capital?

¡Vaya!, será la moa por allá, entre la gente de fuste.

Vaya, chiquilla, eres un mundo que se descubre... ELECTRA.

¿Entonces por qué?... ¡Vaya usted a saber lo que son estas cuestiones! Era un niño, no hablaba con señoritas.

Vaya, a descansar, papá.

¡Vaya! No es mal pueblo Villaseca, ni es mala gente; la única persona de mala condición que allí hay es el reverendo señor cura.

Vaya, vaya, qué duro es este sofá.