50 Verbos a usar para la palabra rusa

Hace veinte años que oigo hablar de los rusos, de los austriacos y de los cosacosdecía sonriendo el anciano Materne, y no me disgustaría ver algunos en la punta de mi fusil; eso siempre alegra el ánimo.

VII LOS RUSOS POLÍTICOS Antes de la guerra, España no creía en los rusos.

En el momento de acusar a los dos rusos, había sentido una secreta turbación, una especie de temor de revelar su amistad por la Condesa; pero el sentimiento de pudor moral, que le impedía referir esa historia íntima, había sido ahogado y vencido por el ímpetu de la venganza.

Rusos, alemanes, franceses, búlgaros, todos se han batido por igual.

En el acto, el Emperador manda que la artillería de la Guardia dispare algunos cañonazos sobre el hielo para que se hunda, y entre los desmenuzados cristales caen al agua dos mil rusos con sus cañones, caballos, pertrechos, armas, municiones y carros, precipitándose confusamente, sin que sus compañeros les prestaran socorro, porque no pensaban más que en huir, y huyendo se ahogaban, y quedándose morían barridos por la metralla francesa.

Esto es caro en Europadecía un ruso de pelo largo y grasiento; pero aquí, ¡con la diferencia del cambio!...

A los rusos nos ha complacido vivir de ideas ajenas; ya estamos saturados de ellas.

Si todo el mundo estuviese compuesto de rusos, como el de la calle de Lepelletier, y de familias, como la del convite de Madrid, la humanidad ofreceria seguramente un espectáculo muy curioso.

Desiré se dirigió al ruso, y éste, con la mayor finura, me suplicó rendidamente, por medio de un intérprete, escribiese allí algunas palabras, y que le hiciese la gracia de que fuese en aquel momento, porque tenia que partir de un dia á otro para las islas de Sandwich.

¿Estáis seguro de que no se enamorará de una rusa, señor cura?

Un día encontró en la calle á un ruso que parecía viejo y enfermo: Sergueff, su antiguo maestro.

Un recuerdo enterneció al ruso.

Los vinos preciosos de don Marcelo enternecían al ruso, haciéndolo más comunicativo.

Conozco esodijo el ruso sin dejarle terminar: el determinismo, la desigualdad, la selección, la lucha por la vida... Los alemanes, tan orgullosos de su valer, construyen sobre terreno ajeno sus monumentos intelectuales, piden prestado al extranjero el material de cimentación cuando hacen obra nueva.

Yo me habia figurado los rusos velludos, de anchos hombros, de largas cejas y ojos hundidos: un ruso como los representados en grabados en madera.

Indudablemente, el señor Doval no aspiraba a que los policías españoles se fingieran rusos de idioma, sino sencillamente rusos políticos.

Un distinguido amigo escritor me manifiesta que la novela española no existe hoy, como la francesa, la inglesa, la rusa.

A el hecho no me ha sorprendido, porque ya en el tiempo en que Tartarín hacía alpinismo los rusos se ocupaban allí de trabajos revolucionarios.

Así, para no citar sino un ejemplo, la reintegración modal de la, sol, fa, mi, iniciada por los rusos, según debía suceder, puesto que en la música rusa tuvieron siempre tanta parte los elementos populares.

para bien saber, y yo para mal contar, que en aquellas tierras invadidas por los rusos, que despues se llamaron Sacramento, vivia y bebia un capitan Sutter, dueño de una máquina de aserrar madera: la máquina resistente y el capitan resignado, hubieron de ponerse de acuerdo en trabajar poca cosa con el asentimiento de un Mr.

Después, según dicen, los meridionales de Europa hemos decaído y nos hemos rezagado; pero sigue en Europa, y es ya casi indudable que seguirá por largo tiempo, el estandarte ó guión de la cultura, que hoy tienen entre manos franceses, alemanes é ingleses, y que tal vez aspiran á levantar también en alto los rusos.

Esta acababa de echar un poco de café en el filtro, y se limpiaba minuciosamente los dedos con su delantal de tela blanca adamascada, adornado, a la rusa, con anchas tiras de bordadura roja.

Y Ferpierre ordenó que volvieran a llamar a la rusa.

¡Qué alegres y decidores nos pusimos todos! cómo se hizo comunicativa la alegría, y qué infieles traducciones llegaban al ruso de nuestros piropos y galanterías! Objeto Desiré de las más delicadas atenciones, se declaró por México con frenesí, y yo, á pesar de mis años, la declaré más mexicana que á la Malitzin.

Que Desiré se retiró á su casa, leyó los versos, los releyó, y ha manifestado al ruso su resolucion de volver al camino de la virtud, al lado de la madre que la llama inundada en lágrimas, junto á la tumba de su heróico padre, y toda la sarta de barbaridades con que te quisiste lucir en tus versitos.

50 Verbos a usar para la palabra  rusa