355 Yo mi amor te ofrecí, bienes y honores, y te inmolé mi fe y el ser que tengo; tú preferiste ingrato mis rencores: me ofendiste cruel, cruel me vengo.

Á escuras vivo de día llorando á moco colgante, hasta que llega la noche y aquí me vengo á cantarte.

Mal revuelto y andrajoso, Entre harapos Del lujo sátira soy; Y con mi aspecto asqueroso Me vengo del poderoso, Y adonde va, tras él voy.

Soy Melisa Smith y me vengo a la escuela.

¡Yo ya me vengo riendo de pensar en las consecuencias de los primeros galopes!...

Hallarme quisiera a mí, Que me perdí desde ayer; Pero ya me vengo a ver, Pues me vengo a hallar en ti.

Hallarme quisiera a mí, Que me perdí desde ayer; Pero ya me vengo a ver, Pues me vengo a hallar en ti.

De las mujeres me vengo de otro modo.

[imagen:¡Ah, doña Catalina!¡Ah, don Francisco!] San Marcos llora; allá le dejo entregado á su viudez, y á los canónigos escandalizados de que Lerma se haya atrevido á tanto: allá se quedan llorando, porque ya no tienen quien les haga llorar... de risa, y yo me vengo aturdido á la corte, porque ya no tengo al lado, en un consorcio infame, á quien me hacía reir de... rabia.

Yo no me vengo, no os he dicho nada que merezca la pena de que me tratéis así.

Esto es, que como no tengo más casa que la vuestra, ni más alma que vuestra alma, aquí me vengo á hacer mis cosas; por delante, es decir, por el zaguán, cuando es de día; por detrás, cuando es de noche.

Justo sería; pero no me vengo, no me puedo vengar.

MANUEL GALVEZ FOOTNOTE: Algunos de los personajes de los cuentos a que me vengo refiriendo, son amigos de Dávalos.

Ya ves si me vengo de tí; un solo hijo que tenias te lo he muerto en cuerpo y en alma; porque tu le matarás por traidor y Dios le condenará por hereje.

¿En quién me vengo yo ahora? AZOFAIFA ¡Clava en mis carnes tu acero!...

—Yo he resistido, y me vengo á mi casa.

Por eso le odio tantoañadió ella incorporándose,y me vengo del muerto, ya que mi débil constitución de mujer me impidió vengarme del vivo.

Para justificar los hechos bárbaros de que me vengo ocupando, seguramente que se traerá á colación las salvajadas que se dice han

Yo voy por Sánchez del Abrojo, y no me vengo sin él».

El mayor mal de los males Que el amor nos da á sentir, Lo que no pueden sufrir Los más simples animales, Es tan malo de pasar, Por ser esta mar mayor, Que me vengo ahogar Cuando yo quiero cantar, Desdeñado soy d’amor.

En el día cuido, como pastor, de Dafnis y de Cloe; y después que los reuno al rayar el alba, me vengo á tu huerto, me divierto con sus plantas y flores, y me baño en sus fuentes.

Lo sécontestó el Marqués:por eso no me vengo de ella, sino de tí.

Porque, terminada aquella labor de gigantes y encontrándome más rico de lo que creía, mis amigos y deudos me obsequian una mañanita con un acta de diputado, que tomo con mis manos lavadas; me vengo á Madrid; mi pariente Cisneros, así como su hija, la de Orozco, me acogen con afectuosa simpatía, y el pobre huérfano encuentra en ambos hogares ese calorcillo de familia que le hace llevadera su soledad.

En vez de hacerlo, me vengo á Landrey á restaurar la vieja casa de mi familia, no por vanidad, sino para conseguir, ayudado de usted, practicar el consejo de mi madre, y ser solamente depositario de mi riqueza... [

» Luego si me vengo yo De aquella que me ofendió, La publico: claro está Que la venganza dirá Lo que la desdicha no.