21 Adjetivos para describir camiseta

A todo lo largo del muelle, en aquella época y en ésta, sigue pasando lo mismo; había casas de pescadores con balcones, ventanas y galerías de madera, adornados por colgaduras formadas por camisetas encarnadas, medias azules, sudestes amarillentos, aparejos y corchos.

Las ahumadas puertas del balcón de la buhardilla se abrieron al cabo, después del mediodía, y lo primero que en el interior descubrieron mis ojos, fué un hombre vuelto de espaldas hacia , con camiseta blanca de ancho cuello azul tendido sobre los hombros, y gorra de lana, también azul, ocupado en colocar en un gran pañuelo de percal, desplegado sobre el arcón que conocemos, algunas piezas de ropa.

» Despachó, pues, delante el P. Yegros algunos indios cristianos que avisasen al cacique principal de los Zamucos de su venida, y que le llevasen en su nombre un bastón, hermosamente guarnecido, y una camiseta colorada, que son las galas que ellos estiman.

Estos indios mascan la coca; y llevan una camiseta mas corta que la de los Moxos.

Y dos camisetas viejas, ¿qué tal te vendrían?

En lo alto de la barricada aparecían los rojos pantalones de la tropa, y algunos hombres del pueblo, con la camiseta rota, sudorosos, ennegrecidos por la pólvora y en el último paroxismo de furor,

El habito que ellos trahen son unos lienços cerrados como una talega o manga con dos bocas muy anchas y lo que sobra del ancho hazenlo muchos pliegues al lado yzquierdo y con el mesmo lienço añudado cahen los pliegues sobre el lado izquierdo, no les sube de la pretina, en el cuerpo una camiseta justa que trahen la mayor parte del cuerpo y piernas de fuera, son todas generalmente malas mugeres y tienen vicios abominables en carnalidad.

A un lado al Poniente le demora la provincia de Calchaquí, indios belicosos; el vestido es como el de los Omaguacas y Chichas; los indios, con manta y camiseta; las indias, unas camisetas largas hasta los tobillos; no hay más vestido.

El uno destos vestidos ha de ser la camiseta leonada y la manta blanca, y el otro ha de ser la manta y camiseta todo blanco, y el otro ha ser azul con flocaduras y cordones.

Muy pocos dependientes, calzados bien, vestidos de negro, con sus camisetas limpias y algunos con un pequeño delantal, hacen el servicio.

Adivinábanlo los vecinos sólo con ver al Menut, quien con aspecto de perro abandonado pasaba el día vagando por la calle, tan pronto en el cafetín de Panchabruta, como frente á la casa de Pepeta, siempre sucio, con la camiseta listada de azul y la blusa al cuello impregnadas de la hediondez de la sangre seca.

Añadían a todo esto el vestir a los niños una camiseta negra, que tenía entretejidos tres hilos colorados, una en el medio y dos a los lados de alto a bajo, y por delante y de atrás.

mañana de primavera; la gente alegre gritaba en los merenderos; pasaban por entre la arboleda, rápidos como pájaros de colores, los encorvados ciclistas con sus camisetas rayadas; por la parte del río sonaban cornetas, y sobre el follaje enjambres de insectos, ebrios de luz, moscardoneaban brillando como chispas de oro.

Oíase el manso y meticuloso guitarreo de los padres previniendo muy cuerdamente cualquier desperfecto de las respectivas camisetas, y el vehemente zurrido de los legos aplicándose furiosos lapos en los lomos, recios y rústicos, á propósito para la afrenta del látigo y de la servidumbre.

En lo alto de la barricada aparecían los rojos pantalones de la tropa, y algunos hombres del pueblo, con la camiseta rota, sudorosos, ennegrecidos por la pólvora y en el último paroxismo de furor,

La camiseta abofellada, la chaqueta andaluza, el sombrero chambergo o de media copa a manera de capacho, el poncho heredado de los vegueros de Valencia, completaban aquel conjunto de soltura y flexibilidad.

Lo importante era que nada faltase al ídolo, pronto siempre á enfadarse y á maldecir la perra suerte de su casamiento, y á la pobre mujercita, cada vez más flaca y derrotada, le parecían insignificantes todas sus miserias, siempre que al señor no le faltase la peseta para el café y el dominó, la comida abundante y las camisetas de franela bien vistosas para seguir sosteniendo la antigua fama.

Cubierta la parte superior del cuerpo con sus ajustadas camisetas, sujetos sus pantalones negros de paño á su cintura por sus caidos tirantes, cuyo uso es aquí muy comun.

Vestía pantalón y blusilla de lienzo; los pies los llevaba descalzos; las mangas de la blusa, remangadas hasta el codo, dejaban ver las de una camiseta á rayas azules y blancas, que también asomaba por el pecho.

De su camiseta burda, color tabaco, emergía el cuello cenceño y nervudo, curtido por la intemperie y terminado en una cabeza deprimida, rojiza y pequeña.

Federico y Daniel, sentados el uno delante del otro, remaban á compás; se habían quitado la camisa, y bajo sus elegantes camisetas de seda temblaban los músculos pectorales, los biceps vigorosos y ágiles, y toda su enérgica complexión de aristócratas aficionados á los duros ejercicios de la gimnasia y de la esgrima.

21 Adjetivos para describir  camiseta