E dizen los sabios, que la cura del lastimero medico dexa mayor senal": "Dura duris efficacius leniuntur: et saepe medici mollioris deformior est cicatrix" (Petrarca, De Remediis Utriusque Fortunae, ii.

Dura y febril es la existencia en las grandes urbes: lo enorme de las distancias y la carestía de la vida imponen, con el trabajo forzado, el avaro aprovechamiento de todos los instantes.

Dura y tenaz ha de ser la lucha de los Gobiernos en la República Argentina para vencer al anarquismo; acaso más de una vez peligren en ella sus instituciones democráticas y su generoso humanitarismo.

Dura es la palabra, mas la paso en obsequio de la paz.

Dura es la palabreja, pero ya que la has dicho, la acepto y contesto que antes has robado tú a otros con escrituras falsas y firmas falsificadas.

Dura es la prueba a que la providencia me sujeta!

Deseaba convertirla pronto en dinero; pero los ocho mil duros limpios que pensaba sacar de ella eran la base de su porvenir, la realización de sus ilusiones, el medio de establecerse y convertir a Tónica en dueña de una gran tienda de telas.

Duro era el camino para la moza.

Ahora bien, setenta mil duros era todo el capital que poseía Morales.

Tan duros son siempre los cimientos de una nación, tan inconmovibles y persistentes, que todavía se traslucen en la reciente República brasileña estos rasgos primitivos de su fábrica.

La semana pasada, sin que te sirviera de modelo, ni Cristo que lo fundó, la diste cuatro duros.

La más dura de sus tareas es el embarque de la leña.

Veinticinco mil duros tampoco son un grano de anís.

Cada peseta representa una gota de sangre; cada duro es un nervio; cada millar de duros, un pulmón.

Un duro por ti y otro por mí; no lo olvides.

Te digo que es la mía... ¡Vaya! ¡Ay, San Antonio, qué duro está el pan!...

] [Imagen: Duro es el paso!

Lo cierto es que cuanto más espléndido me muestre, más claro verá ella el propósito de romper, y aquí de lo que se trata es de cortar por lo sano... Bien pesado y medido todo, puede que los mil duros sean su perdición... si se los gasta en trapos y se echa a rodar por esos mundos de Dios.

El duro es de plata y vale cinco pesetas.

Duro ha sido el remedio.

Aquí y en Francia han sío siempre ciento diez y tres, ciento trece, ¡retiña! Sí; pero como esos tres son duros, y tres duros son sesenta riales, será la cuenta ciento diez, y sesenta, ciento setenta.

Vaya, vaya, qué duro es este sofá.

Cubrir su responsabilidad como ministro, cuando tan duros eran los tiempos, con el manto de la Iglesia, era cosa que jamás se hubiera ocurrido al duque de Lerma.

¡Y qué duro es ese tirano que nos gobierna desde su lecho!

Duro es el trance en que os véis y también yo lamento la muerte de ambos.