El hombre es tan vano y presuntuoso, que apenas discurre un disparate para remediar lo que tal vez no tiene remedio, intenta ponerlo en práctica, lo considera infalible por ser suyo, y se siente capaz de prender fuego al mundo entero á cambio de que triunfe su orgullo de autor.

Vamos, conteste usteddijo Salomé con un tonillo que indicaba grandes deseos de oír un disparate.

Sus labios temblaron y estuvo a punto de decir un disparate.

Entregar El Dragón a los ingleses, que, con cualquier pretexto, nos ahorcarían, era un disparate.

Todo esto hacía que fuera un disparate el entregarnos.

Era terriblemente histérica, pero con rara manifestación desbordante; los nervios desordenados repiqueteaban hacia adentro, y de aquí la súbita tenacidad en un disparate, el brusco abandono de una convicción; y en los prodromos de las crisis, la obstinación creciente, convulsiva, edificándose a grandes bloques de absurdos.

En el primer momento creí que era un disparate, pero después de reflexionar largas horas reconozco que es algo original y digno de realizarse, si resulta posible...

No tenía dinero; lo había gastado todo en aquella fiesta, que ahora le parecía un disparate.

Su ama de llaves le evitaba toda salida, temiendo que hiciese un disparate.

El comandante no podía estar a su lado; aspirar á esto hubiera sido un disparate.

¡Pimentó!... ¡Ladrón!... ¡Devuélveme la escopeta!... Pero el valentón sonreía bondadosamente, satisfecho de mostrarse prudente y paternal con este viejo rabioso; y así fué conduciéndole hasta su barraca, donde quedaron él y los amigos vigilándolo, dándole consejos para que no cometiese un disparate.

Esa mujer va á cometer un disparate, exclamó vivamente mi compañera, y yo no esperé más.

Confiese usted que ha sido una locura, un disparate, lo que ha estado usted haciendo.

Después tuvo esto por un disparate y se fijó en una amiga suya, casada con Moreno Vallejo, tendero de novedades de muy reducido capital.

Lo de Maxi sería un disparate, ella seguía creyendo que era una burrada atroz; mas era un hecho, y no había otro remedio que admitirlo como tal.

Eso es un disparate.

Aconséjate con tu tía, y ella te dirá que lo que estás pensando es un disparate».

¿Pero no sería un disparate?

Eso de echar todo por la ventana en cuanto el señor corazón se atufa, es un disparate que se paga caro.

Pero pronto cayó en la cuenta de que era un disparate.

Lo que dijo Mauricia era un disparate.

Eso es un disparate: ahí tienes, ahí tienes el motivo de todas tus desgracias al no contar para nada con las personas que deben guiarte.

No le suelta a usted un disparate ni aunque se lo pida por favor.

«¡Con qué sandunga les tomaba el pelo a los egipcios!», según expresión de Joaquinito Orgaz, religioso por buen tono y que creía sinceramente que era un disparate la idolatría.

Don Robustiano se puso colorado al pensar que había dicho un disparate.