20 Adjetivos para describir mercenario

D. Juan Cebrian, natural de Perales, pueblo de la provincia de Teruel; su familia noble es conocida con el título del Condado de Fuenclara: entró religioso mercenario en el convento del Olivar donde profesó solemnemente y cultivó su talento en los estudios literarios, logrando todos los grados del Orden hasta el Magisterio general de la misma electo en Toledo en 1617.

Dos soldados bebían en un rincón de la taberna; dos rudos mercenarios, con caras de bandidos.

Si en los últimos diez años se ha visto á los mercenarios suizos saqueando a Peruza, como soldados del Papa, y defendiendo con atrocidades la causa de los Borbones de Nápoles, debe recordarse tambien, en honor del radicalismo helvético, que las asambleas y el gobierno de la Confederacion han adoptado en esta época medidas enérgicas para poner término al mercenarismo.

Está en la actualidad trayéndonos ejércitos numerosos de extranjeros mercenarios, para consumar su ya comenzada obra de muerte, desolacion y tiranía, con circunstancias de crueldad y perfidia apenas comparables con las de los tiempos de barbarie, é indignas del jefe de una nacion civilizada.

Cuando manifesté a toda aquella chusma que su dueña acababa de morir y les mostré su cuerpo en la cama, hubo los llantos y lamentaciones propios del caso; pero yo no les dejé mucho tiempo entregados a los arranques de mercenario dolor, pues fuí enviando a cada uno a cumplir las comisiones necesarias en aquella situación.

Pero en condiciones iguales, un soldado jóven y patriota valdrá mas que un mercenario envejecido en el oficio.

El pueblo gemía agobiado por enormes tributos y vejado y humillado por la guardia personal del príncipe, compuesta de mercenarios eslavos, de eunucos negros y de tres mil muzárabes andaluces.

Un mismo esclavo cuidaba en una aldea del interior al hijo del mercenario griego y á un cachorro de Hamílcar que sólo tenía cuatro años.

Recordando las palabras del mercenario libio en la taberna, había resurgido en su memoria la figura de aquel pastor celtíbero tan enigmático.

Está en la actualidad trayéndonos ejércitos numerosos de extranjeros mercenarios, para consumar su ya comenzada obra de muerte, desolacion y tiranía, con circunstancias de crueldad y perfidia apenas comparables con las de los tiempos de barbarie, é indignas del jefe de una nacion civilizada.

Me dan compasion al considerar que han sido bastante enfermos del alma para dejar sus montañas y su libertad por servir ¡pobres mercenarios! á un soberano extranjero.

Y cuando llegan las nuevas contratas, los mercenarios ruiseñores levantan otra vez el vuelo, indiferentes, sin importarles dónde van; y de nuevo los trenes y los steamers los distribuyen por toda la tierra con sus ridiculeces y manías para recogerles meses después y devolverles a la Galería, su legítima casa, el escenario fijo en el cual han de arrastrar su vejez.

Y que has sido un héroe y un potentado ¿vas á servir á esta ciudad como simple mercenario?

Temimos no fuese peor el triunfo de la soldadesca de todos los países, y salvamos á Cartago, ayudándola á destruir sus mercenarios sublevados.

Verdaderos mercenarios, pasaban del servicio de unos Estados á otros, y esto hacía que en los combates se batiesen sin entusiasmo, con ciertos miramientos, convencidos de que en las filas enemigas figuraban hermanos suyos igualmente á sueldo.

La riqueza de Sagunto excitaba su apetito de salteadores y cuatreros, y oprimiendo la lanza, miraban con ojos feroces el grupo de mercenarios armados al servicio de la ciudad, que en el fondo del Foro, sobre las gradas de un templo, custodiaban al senador encargado de hacer justicia en los días de mercado.

El viejo mercenario alzó los brazos imponiendo silencio: ¡Dejad á la gente que platique! Y con la barba siempre temblona, volvióse á nosotros: ¿Los compañeros ahí tendidos como perros, no valen ninguna cosa?

En las horas nocturnas, tales calles y callejuelas eran por aquellos tiempos lonja de contratación pública de mercenarios deleites y lugar asiduo de feas prostitutas y chulos marchosos.

Por eso mi corazón de niña, ávido de entregarse, se moría de asco; no he querido ya alrededor de más que mercenarios declarados, con los cuales, al menos, no me llevaba chasco.

En las horas nocturnas, tales calles y callejuelas eran por aquellos tiempos lonja de contratación pública de mercenarios deleites y lugar asiduo de feas prostitutas y chulos marchosos.

20 Adjetivos para describir  mercenario