33 oraciones de ejemplo con turbamulta

La primera y más terrible plaga de España es la turbamulta [30] de jóvenes abogados, para cuya existencia es necesaria una fabulosa cantidad de pleitos.

#turbamulta#, f. crowd, rabble; wrongly used by Tata to mean confusion, excitement.

No debemos olvidar a Carraspique ni a Barinaga, ni al graciosísimo ateo, ni a la turbamulta de figuras secundarias que dan la total impresión de la vida colectiva, heterogénea, con picantes matices y espléndida variedad de acentos y fisonomías.

Turbamulta sequebat guardiarum Corporis cum ban doleris, et damarum caterva inter mayordomos miscuebatur».

Se colocaron los bancos en rueda, destinado el frente que daba al ranchositio de honorpara los guitarreros, para las mamás y para los mosqueteros de más consideración; luego seguían las mozas que entrarían en danza y la turbamulta de mirones y de asistentes.

Tras él iba también la turbamulta de buscadores de empleos, que formaban su séquito ministerial, y que, según la voz corriente en antesalas, jamás se desengañaba, y raras veces conseguía lo que buscaba, pues si bien el hombre era servicial y generoso, el ministro no tenía medios cómo satisfacer sus exigencias, siempre crecientes.

Mas, puesto que conceda que está allí, no por eso me obligo a creer las historias de tantos Amadises, ni las de tanta turbamulta de caballeros como por ahí nos cuentan; ni es razón que un hombre como vuestra merced, tan honrado y de tan buenas partes, y dotado de tan buen entendimiento, se a entender que son verdaderas tantas y tan estrañas locuras como las que están escritas en los disparatados libros de caballerías.

La Caporala y Eliseo trataban de poner orden, y cuando los novios y todo el acompañamiento se metieron en los coches, quedó en las inmediaciones de la iglesia la turbamulta mísera, gruñendo y pataleando.

La tía María y Stein atravesaron la turbamulta de criados y cazadores que rodeaban al enfermo.

Mientras la turbamulta de los sarrienses desprovistos de ingenio, de ilustración y de ánimo, dormía a pierna suelta, aquel hombre benemérito se revolcaba en su cama como en lecho de espinas, sin lograr las caricias del sueño reparador.

La turbamulta avanza, la asquerosa canalla asoma las narices...

Vienen en alegre turbamulta a escarbar los cajones de basura que los sirvientes colocan en la vereda para que los levante el basurero municipal.

Había un público de cómicos, trasnochadores, coristas, prostitutas, subidos en coches simones, y una turbamulta de golfos y de mendigos.

Basta con lo dicho para que se vea que la religiosidad de María Sudre era la religiosidad de la turbamulta, del pueblo bajo, entendiéndose aquí por bajeza la triste condición de no saber pensar, de no saber sentir, de vivir con esa vida puramente mecánica, nerviosa, circulatoria y digestiva que es el verdadero, el único materialismo de todas las edades.

Basta con lo dicho para que se vea que la religiosidad de María Sudre era la religiosidad de la turbamulta, del pueblo bajo, entendiéndose aquí por bajeza la triste condición de no saber pensar, de no saber sentir, de vivir con esa vida puramente mecánica, nerviosa, circulatoria y digestiva que es el verdadero, el único materialismo de todas las edades.

Ha ido á suplicarme que intercediera con el señor de Orozco para obtener la plaza de tenedor de libros en una casa de banca, y te aseguro que me interesó aquel humilde representante del estado llano, que se abre paso, á codazo limpio, entre la turbamulta social.

Hallábanse sentados en una pradera junto al camino, al pie de un corpulento castaño, y cuando el charabán pasó delante de ellos, reconocieron entre la turbamulta que venía en la delantera y en los asientos laterales, algunas caras amigas.

No le pareció bien á Torquemada llenar el buche á toda la turbamulta, y en su pobre opinión, se cumplía invitando á los más íntimos, como Donoso, Morentín padre é hijo y Zárate.

Y en diferentes servicios, la turbamulta de doncellas, lacayos y lacayitos, criados de escalera abajo y de escalera arriba, porteros, planchadoras, etc.

Ellos, hombres casados o jóvenes enemigos de la turbamulta; ellas, tal vez criaditas recatadas, modistas aventureras o entretenidas infieles.

En tanto que Lope cantaba, se hacian rajas bailando la turbamulta de los mulantes y fregatrices del baile, que llegaban á doce; y en tanto que Lope se acomodaba á pasar adelante cantando otras cosas de mas tomo, sustancia y consideracion de las cantadas, uno de los muchos embozados que el baile miraban, dijo sin quitarse el embozo: Calla, borracho, calla cuero, calla odrina, poeta de viejo, músico falso.

Y cae también la turbamulta de positivistas franceses, ingleses, alemanes y españoles, que con más ó menos pudor y disimulo van á seguir la bandera de Büchner, de Moleschott, de Carlos Vogt ó de Haeckel.

La turbamulta de papeles diversos llamados Obligaciones del Banco y Tesoro, de Aduanas, Bonos, Resguardos al portador de la Caja de Depósitos, Acciones de carreteras, Títulos del 2 por 100 amortizable, Deuda del personal, se estaban convirtiendo en un 4 por 100 amortizable en cuarenta años por sorteos trimestrales, y emitido al tipo de 85.

¡Imagínate, Santiago amigo, cómo estarían mis muñecas después de haber dado unos doscientos cincuenta apretones de manos! Terminado el saludo de la turbamulta, saludé al cacique, dándole un apretón de manos y un abrazón que recibió con visible desconfianza de una puñalada, pues, sacándome el cuerpo se echó sobre el anca del caballo.

Al fin don Eufrasio vino en mi ayuda: levantó la pesada tapa y me dejó á mis anchas recorrer aquel paraíso fantástico, museo de todos los portentos, iconoteca de insectos, donde se ostentaban en tamaño natural, pintados con todos los brillantes colores con que los pintó Naturaleza, la turbamulta de flores aladas, que son para el hombre insectos, para ángeles, ninfas, dríadas, genios de lagos y arroyos, fuentes y bosques.

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