33 colocaciones para recato

Por esta exaltación del sentimiento materno, que en ella surgía con los caracteres de una virtud sólida, le perdonaba yo sus desfachateces y tonterías, la falta de recato y formalidad que siempre era lo más distintivo y visible de su extraño carácter.

Llamó á la puerta con recato, como si no quisiera ser oído por todos los habitantes de la casa, y sonrió al ver que era Sebastiana la que salía á abrirle.

Y al santo varón no le caía muy en gracia aquel caballero que, apeándose a la puerta del colegio de un carruaje de alquiler, con cierto misterioso recato, había entrado de sopetón en su portería.

En la frontera del castillo y en todas cuatro partes de sus cuadros traía escrito: castillo del buen recato.

Hablaba el confesor, y su voz, ahogada por la rejilla, gangosa y obscura por la costumbre del recato, llegaba hasta Pepita como el balbucear de un pequeñuelo: «Ña...

Olmeido interrumpió: Más bien cuestión de recato.

Sábese que la madre del novio es dama austera de mucho recato y sólidas virtudes, y sorprende la seguridad de que la rígida señora estimula con su patrocinio y simpatía la mutua afición de los muchachos.¿Cómodicen los chismes popularesla displicente viuda acoge con regocijo, para nuera, á la hija de Carlota? Mirando los sucesos al través de Torremar, también á Regina le extraña el caso.

Minutos después, muy exaltado, volvía al palco el buen señor, y al acompañarme, á la salida, todavía hablaba del descoco de la pájara, refiriéndonos, con el recato posible, su vida y milagros, capaces, ciertamente, de poner colorada á una estatua de piedra.

Yo aseguro que si entendierais que también había en nosotras valor y fortaleza, no os burlaríais como os burláis; y así, por tenernos sujetas desde que nacemos, vais enflaqueciendo nuestras fuerzas con los temores de la honra, y el entendimiento con el recato de la vergüenza; dándonos por espadas ruecas, y por libros almohadillas.

Pasó la hora de alatema, y entran y salen los esclavos con gran recato y silencio sacando de aquella casa fardos y lios que colocan sobre las acémilas.

Decíame sobre esto don Gaspar la vez que me hablaba, que era en la iglesia, mil lástimas acompañadas de tantas ternezas que ya, cuanto más apriesa subía mi amor, bajaba mi honor y daba pasos atrás; y en sus papeles más por entero, porque en ellos se habla sin el estorbo del recato y dícense las razones más sentidas.

Castellanos, en sus Varones ilustres le llama «Capitán valeroso y esforzado Varón en guerra y paz de gran recato Gran hombre de á caballo y agraciado.

Ya en este tiempo se daba don Carlos por tan favorecido de Estela, habiendo vencido su amor los imposibles del recato de la dama, que a pesar de los ojos de Claudia, que con lágrimas solemnizaba esta dicha de los dos amantes, le hablaba algunas noches por un balcón, recibiendo con agrado sus papeles y oyendo con gusto algunas músicas que le daba su amante algunas veces.

Con la inauguracion de los cabellos, empezaba la ley del recato y modestia, y se les intimaba con el egercicio mismo de repararlas, la obligacion de ser circunspectas, y el inviolable estilo de bajar los ojos, y de no fijarlos livianamente en el rostro de los hombres.

»Harás, en pos de yendo, hijo mio, Cruzando el hondo Averno, oficio grato Que yo no habito el Tártaro sombrío, Mas los campos Elíseos moro y trato, Deliciosa comarca, gremio pio: Una maga de púdico recato, Si hartas víctimas negras inmolares, Te llevará á los místicos lugares.

Si ésta, lejos de considerarse favorecida con el afecto momentáneo del rey, lo mira como mancha de su recato, espero que este gran monarca no se por ofendido de su repulsa.

De esta suerte nos separamos hasta otra conversación, persuadida ella de que su aparente resistencia la haría pasar en mi concepto por un modelo de recato, y yo con la dulce esperanza de ver bien pronto el fin de esta aventura.

Sabía él que no hay mejor dueña y rodrigón para las mujeres que su propio recato, y en este punto, la virtud de Renata parecía guardarse sola.

Primero el noviazgo, aquel noviazgo, aunque no muy prolongado, de lento reposo, en que Rosa parecía como que le hurtaba el fondo del alma siempre, y como si por acaso no la tuviese o haciéndole pensar que no la conocería hasta que fuese suya del todo y por entero; aquel noviazgo de recato y de reserva, bajo la mirada de Gertrudis, que era todo alma.

Pero ¿ves resplandecer Tantos diamantes en ellas, Que brillando como estrellas, Cuando quiere anochecer, Ponen codicia á los ojos Del más honesto recato, Y cuando fueran retrato Del sol y sus rayos rojos?

Manuelita se defendió; pero al cabo fue ablandándose, y consintió en acudir á una reja baja, donde sin peligro para su recato podía conversar largamente con Marcelo.

Hablaban con los amigos que ocupaban las bolsas de los palcos principales, y hacían señas ostentosas y nada pulcras a ciertas señoritas cursis que no se casaban nunca y vivían una juventud eterna, siempre alegres, siempre estrepitosas y siempre desdeñando las preocupaciones del recato.

¿Porque una flor nace en un vaso de Sevres, se la ha de privar del aire y de la luz? ¿Porque la mujer nace más hermosa que el hombre, se le ha de oprimir el pensamiento, y so pretexto de un recato gazmoño, obligarla a que viva, escondiendo sus impresiones, como un ladrón esconde su tesoro en una cueva?

De pronto, como quien adopta una resolución súbita y firme, púsose en pie, se envolvió en un ancho capuchón de lana obscura, y salió á la calle, que raras veces pisaba, convencida de que el retiro es la salvaguardia del recato.

La narración pienso que está hecha en términos bien honestos, con el mayor recato y decoro posible; además, he modificado la historia, y presentado á la infeliz enamorada del burlador Camargo cuando ejercita la más rigurosa y ejemplar penitencia.

33 colocaciones para  recato