46 oraciones de ejemplo con escamoteado
He vivido en medio de los acontecimientos, y los acontecimientos me han escamoteado la vida.
Una razon era de hacienda, porque sabia que aquello era un juego de cubiletes, que se trataba de escamotear, y que mi humildísimo y trabajadísimo bolsillo iba á ser el escamoteado.
Pero el cubilete estaba delante, el prestidigitador detrás, yo en medio, y mis 27 francos debian ser escamoteados sin recurso.
Segun nuestro modo de ver las cosas, nos habian escamoteado dos sopas, dos platos de carne, dos de legumbres y dos postres, ó sea las dos terceras partes de la comida: ¡otra vez el doscientos por ciento! Mi mujer queria á todo trance que pidiera alguna explicacion sobre el hecho, haciéndolo cuestion de energía española; pero yo miré el asunto de otro modo.
Era la rebusca furiosa de los céntimos escamoteados antes de salir de casa, a espaldas de sus mujeres, rabiosas de hambre y enemigas de que dos hombres de bien se diviertan en la taberna.
, manejando todavía su abanico, sacaba gallinas de sombreros, escamoteaba naranjas, extraía yardas de seda sin fin, de sus mangas, y llenaba la superficie del sótano de géneros que brotaban misteriosamente del suelo, de su propio vestido, de la nada.
Y con su habilidad de gitano, escamoteaba todo lo que con disimulo le ofrecía Mari-Cruz.
Ni se comía un buñuelo ni escamoteaba un ochavo.
El mozo de comedor escamoteaba las botellas de vino y las cedía a mitad de precio a un tabernero del pueblo.
Bien pronto me expliqué aquella cortesía, cuando ví que una chinita escamoteaba furtivamente las botellas de cerveza compradas por la comisión organizadora.
Ver cómo juegan con los átomos y los escamotean y transforman los gases en sólidos y arrastran las fuerzas naturales á todos los usos, es cosa al parecer que hincha á los hombres de un modo extraordinario.
Pero Manuel y Jesús, hartos de narraciones americanas, se hicieron los dormidos, y el antiguo Hombre Boa se calló desconsolado y pensó en aquellos dulces tiempos en que escamoteaba sortijas a los indios y les sacaba la pecera.
Pero Manuel y Jesús, hartos de narraciones americanas, se hicieron los dormidos, y el antiguo Hombre Boa se calló desconsolado y pensó en aquellos dulces tiempos en que escamoteaba sortijas á los indios y les sacaba la pecera.
Una operación parecida a ésta solía realizar el Pastiri con tres fichas de juego de damas, debajo de una de las cuales ponía una bolita de papel o miga de pan; apostaba a que no se decía debajo de cuál de las tres estaba la bolita, y si por casualidad alguno acertaba, la escamoteaba con la uña.
He vivido en medio de los acontecimientos, y los acontecimientos me han escamoteado la vida.
Supuse que, al fijar los acontecimientos de aquella época, Aviraneta había escrito la parte de vida pública escamoteando lo más íntimo y personal.
Incansable yo en mi plan investigador, puse cerco á sus camándulas, redoblé mis zalamerías, ensanché todo lo que pude el campo de la confianza, y por fin hoy, transcurrido un día de estas fáciles relaciones, he logrado arrancarle aquella otra parte de la verdad que me escamoteaba.
Aguantar que á uno no le quieran, ya es martirio bastante; pero ver que viene otro y con sus manos lavadas le escamotea la novia, le roba todo... Eso ya pasa de raya...
SIMPLE.Mi amo el señor Slender, viéndola pasar por la calle, envía á saber, señor, si un tal Nym que le ha escamoteado una cadena, la tiene ó no.
FALSTAFF.Me alegraría de que todo el mundo fuera escamoteado; porque yo lo he sido, y golpeado por añadidura.
FORD.Por cierto, señor mío, que os vamos á llevar á Windsor á casa de un tal Brook, á quien habéis escamoteado dinero ofreciendo servirle de tercero.
Cárlos por su parte demostraba principios mas relajados en cuanto al respeto que se debe á la propiedad ageua, escamoteando de los cestos de las fruteras cebollas y manzanas que metia en sus faltriqueras tan grandes que parecian invadir su traje en todos sentidos.
Chipiteguy lo había, sin duda, escamoteado.
Conspiran embozados y agreden en la sombra, escamotean vocablos ambiguos, alaban con reticencias ponzoñosas y difaman con afelpada suavidad.
Cuando Bonaparte fué cónsul y cuando fué emperador quiso también el despotismo; pero obró de otra manera; entró en él de frente y á pié llano, sin emplear ninguna de las miserables precauciones con que hoy se escamotean una á una todas nuestras libertades, así las primogénitas como las segundonas, lo mismo las de 1789 como las de 1830.