21 Adjetivos para describir avaro

El viejo avaro se mostró inflexible.

Y aunque el viejo la guarda como un tesoro, de las miradas torpes de avaros ojos, y celosías no dejan ver su encanto que el sol codicía; y aunque esclavos feroces y muros densos, á audacias de galanes ponen respeto, ama la hermosa, que no hay puertas ni muros que amor no rompa.

Tengo la satisfacción de ver a un avaro, atemorizado con las imágenes que presento a su codicia, abrir sus tesoros y distribuirlos con mano pródiga; a un lascivo, huir de sus torpezas; a los ambiciosos, retirarse a las ermitas, y hacer constante y firme en sus obligaciones a una esposa a quien hacía titubear un amante seductor.

Saludaba á la reunión con tres gruñidos, despreciaba las insolencias de la hija, y se hundía por fin en la obscuridad de su casa, maldiciendo á los avaros caseros que, para fastidiar á los pobres, hacen siempre las puertas estrechas.

Despidióse el avaro contentísimo por haber prestado un servicio al señor Loayza, y viendo en el porvenir, por vía de réditos, la canonjía magistral cuando menos.

Después de rezar un ratito junto al cadáver pasó la desconocida al gabinete, adonde la siguió el avaro deseoso de meter baza con ella, haciéndole comprender que él, entre tanta gente ordinaria, sabía distinguir lo fino y honrarlo.

CAPÍTULO 3 1 Esto también sepas, que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos: 2 Que habrá hombres amadores de [mismos], avaros, vanagloriosos, soberbios, maldicientes, desobedientes de sus padres, ingratos, impuros.

Pintaba a veces, con rasgos dignos de Molière o de Balzac, el tipo del avaro, del borracho, del embustero, del jugador, del soberbio, del envidioso, y después de las vicisitudes de una existencia mísera resultaba siempre que lo peor era para él.

Razon es, pues soy rico, Que viva alegre, coma y me regale, Y que el avaro inico Me tema siempre, y nunca ese me iguale, Pues puedo en paz y en guerra Honrar á los más nobles desta tierra.

Si no, dígame alguno ¿qué poder humano hay en esta vida que pueda hacer una tan gran cosa como las damas hacen, en mudar un hombre y hacelle todo otro de lo que es? ninguno en este mundo podrá hacer de un cobarde valiente y ni de un avaro liberal, sino estas tan poderosas señoras, que mudan condicion, sér y vida al hombre que por ellas es hombre.

Mi tío era un avariento frustrado; la sagacidad y los apetitos de bienestar y goce que ha desarrollado la sociedad moderna contrarrestaban su inclinación, porque actualmente el avaro a la antigua se pondría en ridículo; no podría alternar.

Al verla en sus primeros años tan hermosa, el avaro médico dijo: Mi esposa me ha dado una perla: pues bien, embellezcamos esta perla; rodeémosla de atractivos, pulámosla y hagámosla tan hermosa que sea inapreciable.

No puso mucho de su parte en hacerlo, y demostró algunas ganas de que se hubiesen realizado los planes de sus compañeros de armas, y los principios que desplegó este avaro, orgulloso y miserable, fueron los mismos ó peores que los que manifestaron sus corresponsales los Ranqueles.

Y al fin, logró alucinar á un avaro principal, que le dió el dinero que necesitaba para saldar sus cuentas con la Administración, con el interés de veinte por ciento al mes, y todavía con derecho de quedarse, si al cabo de dos años, Isio no podía pagar su deuda, con todos sus bienes, hipotecados por segunda vez á favor del acreedor, que ignoraba que en caso de quiebra entraría antes á cobrar la Administración.

A nadie se le persuadirá que don Francisco de Quevedo, que era en prosa y en verso un poeta lírico antes que todo, idealizador de lo feo, como quien miraba la miseria con vidrios de aumento, hizo la figura de ningún avaro real ni posible en su Licenciado Cabra.

Duran estas irresoluciones tanto, que muchos por falta de valedor, no hazen sino c[=o]poner, y echar comedias al suelo del arca, con el ansia que suele el avaro recojer y acumular doblones.

Inmediatamente pasaron las peluconas al bolsillo del ecónomo, que era un avaro más ruin que la encarnación de la avaricia.

Lo óptimo es el Lebrato y su hijo, y Pilara y Quilino, y el médico don Elías, y el magnífico tipo del Berrugo, avaro supersticioso, que Balzac adoptaría por suyo, y la fantástica historia del descubrimiento del tesoro, que Walter Scott hubiera robado para su Anticuario.

El torpe avaro la existencia ofrece, Cayendo, ruin, ante su altar de hinojos.

Y un avaro llamado Silvestre, como viera repartir tanto dinero á los franciscanos, reclamó el importe de unas piedras entregadas al Santo para erigir piadosa iglesia.

Pero no es así, el avaro artesano, en cuyo taller trabajaba yo, esplotaba de tal modo mi trabajo, que solo me dejaba de las utilidades tan escasísima parte, que apenas si alcanzaba a satisfacer mis necesidades i las de una pobre anciana que vivia a mis espensas en los últimos dias de su vida.

21 Adjetivos para describir  avaro