32 Adjetivos para describir cigarrillo

Estrechó entre sus dos manos la diestra que le tendía la alemana, y ella, con cierta emoción por las efusivas palabras, volvía sus ojos a todos lados, extrañándose de verle solo, creyendo que iba a aparecer repentinamente la esbelta silueta y el cigarrillo encendido de la norteamericana.

Fantomas se pavoneaba en la apoteosis de su gloria y fumaba cigarrillos turcos como una cocota.

¿Usted será tan amable que nos envíe el aparato del doctor Chartroule y una provisión de cigarrillos yodados?

Me apartó, sonriente y meneando su cabeza de león manso, se puso á armar con cachaza un cigarrillo negro.

Por lo que pude observar, me pareció que la trataba con extraordinario desdén y gran familiaridad, hablándole de «» y encendiendo en su presencia un cigarrillo ordinario, mientras ella, por su parte, no parecía estar muy tranquila, como si hubiera asistido, más bien obligada, que por su gusto.

Sentose este al lado de la muchacha, que le presentó un paquete de sus cigarrillos predilectos, emboquillados, bastante largos, liados con gran esmero.

Ella sólo gustaba de los cigarrillos orientales... Y como persistiese el acre olor del cigarro habano, jugoso y bravío, rebuscó en su maletín de aseo, derramando sobre la cama el fondo de varios frascos de esencia largo tiempo olvidados.

El padre Claudio, que a la vejez, cuando no podía ya estropearse aquella hermosa dentadura de que tanto se envanecía antes, habíase aficionado al tabaco, fumaba cigarrillos perfumados con vainilla, y el padre Tomás, de vez en cuando, sacaba de la manga una caja mugrienta y aspiraba un polvo de rapé.

La tía Jeroma, madre de nuestro diputado Bartolo; la tía Brígida, su prima hermana y madre del prudente Quino; Elisa, joven de veinticinco años, recién casada, con temperamento y aficiones de vieja, y que por tenerlas todas hasta fumaba como ellas cigarrillos envueltos en hojas de maíz; por último, la vieja Rosenda, una mujer que vivía sola en un hórreo y que algunos tenían por bruja.

Si os fijais en los hombres, les vereis divagar (envueltos en la inevitable capa española, algunas veces ricamente adornada) en grupos mas ó menos bulliciosos ó siquiera por parejas, aspirando el humeante cigarrillo, con la mirada abierta, listos á la chanzoneta, la voz robusta y el andar ligero.

Anduvimos por el bosque cosa de media hora y el Rey fumó cigarrillos y charló incesantemente.

Sentose este al lado de la muchacha, que le presentó un paquete de sus cigarrillos predilectos, emboquillados, bastante largos, liados con gran esmero.

Sacó el padre Claudio de una petaca de oro, cubierta de filigranas, dos cigarrillos casi microscópicos, que olían a perfumes de tocador más que a tabaco, y después que vió arrojar al militar las primeras bocanadas de humo, dió principio a la conversación.

Tronaba el español ante la botella liberalmente renovada y la caja de cigarrillos abierta sobre la mesa,

Me apodero del cigarrillo ofrecido y solicito desenfadadamente una taza de te con bizcochos.

El cual, entonces, se decide a encender su olvidado cigarrillo, y fuma con impaciente y nervioso afán, puestos los ojos y el corazón en el dulce misterio de aquella hermosa mujer... El tren correo salió de La Coruña a las nueve de la noche; aunque estas señoras procedan de la capital, ¿cómo a las diez y media se han rendido ya tan profundamente a la pesadumbre del sueño?

Sentose este al lado de la muchacha, que le presentó un paquete de sus cigarrillos predilectos, emboquillados, bastante largos, liados con gran esmero.

Y colocaba sobre la mesa galletas, pasteles, una botella de ron; todo lo que podía encontrar en la despensa, y hasta un paquete de cigarrillos rusos con boquilla dorada que la hortelana miraba con escándalo.

Lanzando un ¡ah! gracioso, se tendía en el diván á fumar sus cigarrillos saturados de opio, que la calmaban y la sumían en adormilado bienestar.

Junto á los puentes de atrevida curva hay militares que se apresuran a ofrecer una mano á los viajeros, ayudándolos á pasar sobre el lomo resbaladizo de mármol, en espera de una propina ó un simple cigarrillo.

Al nombre del Marqués de Ulloa, el viajero enguantado, que hasta entonces escuchaba como quien oye llover, y sin ocuparse más que del cigarrillo suave que fumaba, prestó atención y aun intentó volverse; pero esto no era factible, atendido que cada vez iban más apretados, porque el Arcipreste, reclinando la cabeza en la esquina, y cubriéndose la cara con un pañuelo blanco, adoptaba postura más cómoda, y ocupaba todavía más sitio.

Mi hermano, que había fregado platos, liado cigarrillos, azotado negros, vendido sombreros y zapatos, racionado tropas y traficado en estiércoles, iba á entrar en esa escogida falange de próceres, que son como la imagen del poder histórico inamovible y como su garantía de permanencia y solidez.

» Poco después de mediodía, cuando ella fumaba su vigésimo cigarrillo, llamaron á la puerta.

¿No ha venido á hacerme confidencias? Fúmese ese cigarrillo musulmán, regalo de Turkán Bey; como tiene opio, le servirá de calmante.

Grandes y negras patillas ó retorcidos bigotes, cuerpos robustos, cabezas altivas; un poco de petulancia en todas las miradas y de benevolencia en todas las sonrisas; la conversacion siempre ruidosa; el cigarrillo en todas las bocas, apoyado con gordas interjecciones por via de puntuacion; riqueza de fantasía y de proyectos; inclinaciones heróicas y poca formalidad: tal es el conjunto de circunstancias sobresalientes.

32 Adjetivos para describir  cigarrillo