, cogió un fuelle grande y lo rellenó de esa casca que queda después de curtidos los pellejos y que huele que apesta; luego hizo un agujero en el tabique de la trastienda y esperó la ocasión oportuna.

La de la droguería hacía muchos ascos, diciendo: «¡Uy, cómo apesta eso, hija, guarda, guarda esas ordinarieces!».

Así me gusta a mí la gente, arregladita... Y cuando yo vengo aquí te pones la batita de lana, que unos días apesta a canela y otros a petróleo... Mentirareplicó Fortunata, oliendo su propio vestido.

Aquella Monina, bellísima criatura de cuatro años, ídolo de su corazón por un fenómeno semejante al que hace a los grandes perrazos encariñarse con los niños, que le tiraba de las patillas y le hacía andar a cuatro pies, guiándole ella por una oreja, había rechazado un día un beso de sus aguardentosos labios, diciéndole con infantil repugnancia: ¡No..., que apesta!...

=(Con toda su alma.)= ¿Sabes que de tanto oír hablar de Italia me apesta la tal Italia?

Ella, sin aguardar contestación, se alejó diciendo: ¡Uf! ¡Cómo apesta usted a vino!

Esta casa me apesta con tanto chirimbolo inútil.

Un olor nauseabundo de humedad de siglos y podredumbre encerrada, apesta el ambiente.

Y la multitud al revolverse apesta más, como si se hurgase la basura.

Está muy impaciente por hablar contigo de política, pues según él, aquí hay una plaga de gente ministerial que le apesta.

Como el chisporroteo de la fritanga de sangre que está puesta á la lumbre y bulle y apesta, así salía de allí un lenguaje germanesco y nauseabundo.

Como el chisporroteo de la fritanga de sangre que está puesta á la lumbre y bulle y apesta, así salía de allí un lenguaje germanesco y nauseabundo.

Confieso que me aburro un poco debajo de mi envoltura que apesta á pescado y alquitrán.

Lo gringo me apesta.

Pero ¿no ve usted que está hecha un asco, y que apesta toda la habitación?

¡Ay, Teresa!, ya el crimen apesta.

Tú estás loco... ¡Tanto como te gusta! —Me gusta, sí...; pero apesta...

Tomó por el brazo al fámulo Babzola, uno de los que hacían las camas: Oye, Babzola; por aquí huele que apesta.

Aquí, como en la ciudad del Rin, todo lo que huele bien se embotella para exportarlo, dejando todo lo que apesta para el consumo de casa.

la política apestay nunca apesta como al convertir en cuestión política la que debiera ser cuestión nacional,el único desinfectante eficativo es volver los ojos á otras manifestaciones de la actividad: á las corrientes aguas, donde va la vida española por más ancho cauce.

Pero, y si la comedia apesta, y por consecuencia ni se la pagan ni se vende, ¿qué harán entonces? PIPÍ.Entonces, ¿qué sé yo?

Voy totalmente lleno de personas y de bultos, y mi ambiente, impregnado antes de olores agradables, apesta ahora a gallinas, a pescado, a melones, a queso...

No viene acá porque dice que le apesta esta casa.

No viene acá porque dice que le apesta esta casa.

Todo eso apesta a hospital, a fénico, a pus! ¡No lo nombres siquiera!