25 oraciones de ejemplo con vizcacha

731 me llevó consigo un viejo que pronto mostró la hilacha, dejaba ver por la facha que era medio cimarrón, muy renegao, muy ladrón, y le llamaban Vizcacha.

" 740 Porque maté una vizcacha otra vez me reprendió; se lo vine a contar yo, y no bien se lo hube dicho: "Ni me nuembres ese bicho", me dijo, y se me enojó.

744 No atinaba don Vizcacha a qué lado disparar, hasta que logró montar, y, de miedo del chicote, se lo apretó hasta el cogote, sin pararse a contestar.

Accediendo gustoso a tan justo pedido, he mandado a un diario las siguientes líneas: Señor director: persigamos a las vizcachas que arrasan los sembrados; matemos a las ratas que comen documentos y propagan la pulmonía y la peste; organicemos ejércitos langosticidas; fumiguemos los árboles arrugados por la diapsis pentágona, y hagamos guerra a los gatos ardorosos que gritan en los tejados.

A la 1-1/2 leguas de marcha al O SO encontró con ella, transitando por un terreno bajo, húmedo y lleno de cuevas de vizcachas, leones, &c.: los pastos elevados, y la tierra negra y blanda.

Allí nemrodicé, con excelente puntería, contra martinetas, avestruces, tordos y pechirrojos, y aun fáciles y poco avisadas vizcachas.

Vizcacha, especie de conejo con cola larga y pelo esponjoso semejante al del castor; es originario del Perú.

Entre estos animales originarios se cuentan las especies de vicuña, llama, paco, huanaco y alpaca, como también las especies de vizcacha y aña, de la familia de los zorros, y la anta llamado comunmente la gran bestia, animales que no se encuentran en ninguno de los otros Continentes.

» Los pretendidos Talmudistas, en la colección de sus tradiciones rabínicas, se olvidaron en decir, que Noé, mediante su mágica varilla, hizo arrojar de la boca del león, tigre, leopardo y otros animales de esa especie, á la vicuña, llama, huanaco, vizcacha y demás animales originarios del Perú(!).

Al crepúsculo, en las cuevas de contorno escampado como los aproches de una fortificación, charlaban las vizcachas y agoraban las lechuzas cuyo pichón sabroso era una bola de grasa blanca.

El viejo Vizcacha y Picardía caracterizan las mañas y la filosofía del pícaro.

Así el retrato del viejo Vizcacha: Viejo lleno de camándulas, Con un empaque a lo toro; Andaba siempre en un moro, Metido no en qué enriedos, Con las patas como loro De estribar entre los dedos.

Resultado del consumo de las carnes de vizcacha, cóndor, gato, de la sangre de toro y de las comidas saladas.

Resultado del consumo de las carnes de vizcacha, cóndor, gato; de la sangre de toro y de las comidas saladas.

Esto importa un problema, sobre todo cuando se trata de lindes extensos y es menester preservar los cercos protectores, incipientes aún, de la zaña destructora de las liebres y las vizcachas. Para felicidad de los colonos,

Queda aun la vizcacha difundida por los campos.

Los consejos que da el viejo Vizcacha a un hijo de Fierro, son eco demasiado patente de las advertencias que el presidiario hace al héroe de El Diablo Mundo.

Pero en medio de las narraciones ingenuamente sentimentales, el tono de picaresca que tiene este libro en todas sus páginas se afirma todavía más en su terminación, gracias a los dichos y refranes que aportan Fierro, sus dos hijos, el primogénito del sargento Cruz y el viejo Vizcacha.

En resolución, el chico no puede cobrar la herencia, porque es menor; en cambio le ponen de pupilo bajo la tutoría de un viejo cínico, ladrón, borracho, que responde al apodo de Vizcacha.

El viejo Vizcacha vive como un animal inmundo y ladino.

El viejo Vizcacha no es ni más ni menos que un pícaro de Mateo Alemán, de Hurtado de Mendoza o de Cervantes.

Hacéte amigo del Juez, no le des de qué quejarse; y cuando quiera enojarse vos te debés encoger, pues siempre es bueno tener palenque ande ir a rascarse... Este redomado pillo que llaman Vizcacha parece un ente redivivo, arrancado propiamente del Arenal de Sevilla, del Perchel de Málaga, de las Almadrabas de orilla de la mar.

En lo que atañe a las armas y la defensa personal, el viejo Vizcacha presta al muchacho unos consejos que parecen arrancados de un código truhanesco del siglo XVI.

Las vizcachas auguran siempre una población cercana.

Sin remontarnos a Schopenhauer, podemos comprobarlo en los estudios de Viazzi sobre la lucha entre los sexos; y es notorio que en el más expresivo de los poemas gauchescos, el hijo de Martín Fierro parece haberlo aprendido del "Viejo Vizcacha": "Y menudeando los tragosaquel viejo como cerro,no olvidés, me decía, Fierro,que el hombre nunca ha de creeren lágrimas de mujerni en la renquera del perro.

25  oraciones de ejemplo con  vizcacha